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viernes, 31 de enero de 2014

Si un beso te doy, pecado no ha de ser; culpable es la noche que incita a querer.


Hoy es uno de esos días de recuerdos y los comparto.
Hace cincuenta años, frente al Parque de Villa Domínico, inauguraron un restaurante café, Trasnoche 13, el mismo nombre de un programa exitoso de Canal 13 en esa época. Esta noche de luna era la cortina del bloque de tango.
En esa zona, sobre la vereda opuesta, estaba el restaurante café Troilo y le había llegado la competencia, se decía. En palabras de hoy, diríamos se estaba fundando un polo tanguero y gastronómico.
Era tal éxito de Troilo, que venía gente de Capital a comer, se comentaba y era cierto. Yo conocía a algunos de ellos.  
Ambos emprendimientos desaparecieron con el tiempo. Troilo volvió y está presente, esta vez en la esquina del parque, Mitre y Darwin, como parrilla.

Letra y enlace en Youtube de esta pieza musical grabada por estas grandes figuras del tango

en la versión de Carlos Di Sarli con la voz de Roberto Rufino.
en la versión de Carlos Roldán con la orquesta de Francisco Canaro  y se oye una trompeta en sordina 
y la versión de Osvaldo Pugliese cantando Jorge Maciel 




Esta noche de luna
Tango 1943
Música: José García / Graciano Gómez
Letra: Héctor Marcó
Acercate a mi
y oirás mi corazón
contento latir
como un brujo reloj.
La noche es azul,
convida a soñar,
ya el cielo ha encendido
su faro mejor.
Si un beso te doy,
pecado no ha de ser;
culpable es la noche
que incita a querer.
Me tienta el amor,
acércate ya,
que el credo de un sueño
nos revivirá.

Corre, corre barcarola,
por mi río de ilusión.
Que en el canto de las olas
surgirá mi confesión.

Soy una estrella en el mar
que hoy detiene su andar
para hundirse en tus ojos.
Y en el embrujo
de tus labios muy rojos,
por llegar a tu alma
mi destino daré.
Soy una estrella en el mar
que hoy se pierde al azar
sin amor ni fortuna.
Y en los abismos
de esta noche de luna,
sólo quiero vivir,
de rodilla a tus pies,
para amarte y morir.

Acércate a mi
y oirás mi corazón
contento latir
como un brujo reloj.
Mi voz te dirá
Palabras de miel
que harán de tu pecho
fuego encender.
El canto del mar
repite en su rumor
qué noche de luna,
qué noche de amor.
Dichoso de aquel
que pueda decir,
yo tengo un cariño
qué dulce es vivir.

Corre, corre barcarola,
que la luna se escondió.
de todotango








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