Los rosarinos pretenden dar la vuelta al mundo en bicicleta, recorriendo 144 países en 15 años. Favio Giorgio y Marcelo Lezcano son dos auténticos aventureros que están a punto de echar a rodar un sueño que se transformó en un gran desafío, el cual requirió de un rotundo cambio de vida para poder llevarlo a cabo.
Giorgio era empleado de la obra social Osecac y pidió el retiro voluntario. Lezcano trabaja por su cuenta como tatuador. Ambos dejaron todas las cuestiones personales de lado para entregarse a esta riesgosa empresa. Y a ellos se unirá el italiano Uliano Pistelli, quien abandonó la escuela de cine de Bologna para incorporarse a la travesía.
Serán 156.400 kilómetros pedaleando los cinco continentes. Enfrentando todos los climas, las más variadas superficies y adversidades extremas. Arrancarán el 4 de enero en Rosario, se trasladarán en bicicleta hasta Salto y Paysandú (Uruguay), donde dictarán unas charlas.
El 9 de febrero saldrán en avión desde Buenos Aires rumbo a Madrid, donde también brindarán disertaciones. Desde allí se movilizarán a Algeciras, Tánger (Marruecos) y por allí comenzará el recorrido por África, la primera gran estación de este emprendimiento, que significa una descarnada prueba para el alma, el carácter y la capacidad de resistencia humana.
“Los viajes te abren la cabeza y te hacen ver otras cosas que, con la rutina, no se pueden llegar a ver. La bici es un transporte ecológico, saludable y te acerca a lo natural. Te permite frenar un poco y darte tiempo para contemplar. Te lleva a ser amigo de cada lugar. Te permite crear lazos increíbles”, comenta Favio, para luego agregar que “estos viajes son, para nosotros, una forma de vida. Sabemos la fecha de salida, pero no conocemos bien la de vuelta. Tenemos planificado lo que podemos pero sabemos que después estamos expuestos a un montón de cosas”.
Por su parte, Marcelo reconoce que “será el desafío más grande de nuestras vidas. Este viaje durará muchos años. Trataremos de tocar todos los países que podamos, no importa el tiempo que lleve. Estimamos que puede durar de 10 a 15 años”.