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viernes, 11 de octubre de 2013

Acerca de crueldad: Philip Zimbardo haciendo ciencia en la cárcel de Stanford


HACIA UN PROTOCOLO PARA VICTIMAS DE ABUSOS


Wikipedia tiene un buen artículo sobre el experimento de la cárcel de Stanford.
Aquí el enlace y una reseña del mismo. Mis comentarios, en cursiva, están destinados a mostrar las dificultades con las que se choca al acercarse al tema de la violencia, y se orientan a las objeciones y planteos al experimento de la cárcel de Stanford, excelentemente rememorados en el artículo de Wilipedia. 


Experimento de la cárcel de Stanford

Es un conocido estudio psicológico acerca de la influencia de un ambiente extremo, la vida en prisión, en las conductas de hombre, dependiente de los roles sociales complementarios que desarrollaban: cautivos y guardias. Desarrollado en 1971 por un equipo de investigadores conducido por Philip Zimbardo de la Universidad Stanford. Se reclutaron voluntarios que desempeñarían los roles de guardias y prisioneros en una prisión ficticia. Sin embargo, el experimento se les fue de las manos y se canceló en su primera semana.

Conclusiones

Se ha dicho que el resultado del experimento demuestra la impresionabilidad y la obediencia de la gente cuando se le proporciona una ideología legitimadora y el apoyo institucional. También ha sido empleado para ilustrar la teoría de la disonancia cognitiva y el poder de la autoridad.
En psicología se suele decir que el resultado del experimento apoya las teorías de la atribución situacional de la conducta en detrimento de la atribución disposicional. En otras palabras, se supone que fue la situación la que provocó la conducta de los participantes y no sus personalidades individuales. De esta forma sería compatible con los resultados del también famoso experimento de Milgram, en el que gente ordinaria cumple órdenes de administrar lo que parecen shocks eléctricos fatales a un compañero del experimentador.
Casualmente poco después de la finalización del estudio se produjeron motines sangrientos en las prisiones de San Quintín y Attica, y Zimbardo comunicó sus descubrimientos al Comité judicial de los Estados Unidos.

Críticas al experimento

El experimento fue ampliamente criticado por su falta de ética y considerado en los límites del método científico. Los críticos incluyen a Erich Fromm, que cuestionó si se podrían generalizar los resultados del experimento.
Como fue un trabajo de campo, fue imposible llevar a cabo los controles científicos tradicionales (el estudio de campo tiene sus propias reglas dentro de la ciencia, la crítica que se ha presentado es propia de las ciencias naturales, pero el mundo no es tan sencillo como pretenden). Zimbardo no fue un mero observador neutral, sino que controló la dirección del experimento como «superintendente» (conscientes de la influencia del investigador en su quehacer, los antropólogos contemporáneos se definen como observadores participantes, oponiéndose en la denominación al rol tradicional del observador no participante. Saben que la presencia del observador altera el medio, un saber que no dejan a un costado y se observan a sí mismos).  Las conclusiones y las observaciones de los investigadores fueron muy subjetivas y basadas en anécdotas, y el experimento es muy difícil de reproducir por otros investigadores (y, sí, por definición, los trabajos de campo, observar en el medio y devenir propios, no se repiten. Están destinados a plantear hipótesis que formarán paso de investigaciones posteriores. Pero el experimento en cuestión no es un estudio de campo, tal sería que Philip Zimbardo observara en una prisión real). 
Algunos de los críticos al experimento argumentan que los participantes basaban su conducta como se esperaba que se comportasen o que la modelaron de acuerdo con estereotipos que ya tenían sobre prisioneros y guardias. En otras palabras, los participantes realizaban un mero juego de rol. (lo de mero está adjetivando de más, en ciencia, si vamos a investigar, investigamos lo que aparece. Rescato las líneas de formar roles a partir de lenguajes conocidos, no existe el punto de partida cero absoluto y nos lanzamos a lo desconocido revolviendo el equipaje que traemos para agregar a lo que improvisamos)  Como respuesta, Zimbardo declaró que, incluso aunque inicialmente pudiera haber sido un juego de rol, los participantes internalizaron sus papeles a medida que el experimento continuó.
El experimento fue criticado también respecto a su validez ecológica. Muchas de las condiciones impuestas al experimento fueron arbitrarias y pueden no estar correlacionadas con las condiciones reales de las prisiones, incluyendo la llegada de los «prisioneros» con los ojos vendados, hacerles vestir solamente batas, no permitirles vestir ropa interior, impedirles mirar a través de ventanas y prohibirles usar sus nombres reales (la discusión no es obviable y no merece hacerse bizantina. Encuentro recomendable tener en cuenta Si esto es un hombre de Primo Levi, que cuenta su experiencia cotidiana durante su cautiverio en el campo de exterminio nazi de Auschwitz, durante la Segunda Guerra Mundial). Zimbardo se defendió de estas críticas declarando que la prisión es una experiencia confusa y deshumanizante, y que era necesario impulsar estos procedimientos para darles a los «prisioneros» las condiciones mentales adecuadas; pero es difícil saber cuán similares son estos efectos a los de una verdadera prisión, y las condiciones del experimento son difíciles de reproducir exactamente para que otros investigadores puedan llegar a conclusiones a este respecto.
Algunos dicen que el estudio fue demasiado determinista. Los informes describen diferencias significativas en la crueldad de los guardias, el peor de los cuales fue llamado «John Wayne» por los prisioneros, pero otros fueron más amables y a menudo concedieron favores a los prisioneros. Zimbardo no realizó ningún intento de explicar estas diferencias.
Por último, la muestra fue muy pequeña, de sólo 24 participantes en un periodo de tiempo relativamente pequeño. Y dado que los 24 interactuaban en un mismo grupo, tal vez sea más correcto considerar el tamaño de la muestra como 1 (Sociológicamente, no es una muestra tomada del universo de prisiones. Habían conseguido a los participantes por avisos en el diario. O sea, en ciencia, se dice que para criticar, buscaron donde no hay).
Haslam y Reicher (2003), psicólogos de la Universidad de Exeter y la Universidad de St. Andrews, llevaron a cabo una repetición parcial del experimento con la asistencia de la BBC, que televisó escenas del estudio en un reality show llamado «El experimento». Los resultados y conclusiones fueron muy diferentes a los de Zimbardo. Aunque su procedimiento no fue una réplica directa del de Zimbardo, su estudio arroja nuevas dudas sobre la generalidad de sus conclusiones.1 (una repetición parcial y con otra exposición -reality show- es otro diseño, ningún investigador científico esperaría el mismo resultado. Y si hablamos de espectáculo, vean, en el apartado siguiente de Wikipedia, cómo prendió).

Cultura popular
·       
 Una novela de 1999 del autor alemán Mario Giordano titulada Black Box se inspiró en el experimento de Stanford.
·       En 2001 la BBC realizó un documental, The Experiment, que recreaba el experimento con voluntarios. Se detuvo por preocupaciones acerca del bienestar de los participantes.2
·       Das Experiment (El experimento), una película alemana del director Oliver Hirschbiegel rodada en 2001, está basada en la novela de Mario Giordano, que a su vez se inspira en este experimento.
·       The Black Box, una obra adaptada de Das Experiment, fue dirigida por Anthony S. Beukas. En ella actuaron miembros de la Yeshiva College Dramatics Society de la Universidad de Yeshiva en diciembre de 2005.
·       El relato del experimento va a ser filmado por Christopher McQuarrie, ganador de un Oscar por el guion de Sospechosos habituales, a partir de un guion que escribió con Tim Talbott.
·       El 27 de octubre de 2006, la productora de Madonna detuvo la producción de una película sobre el experimento.3
·       El episodio My Big Fat Greek Rush Week de la serie de televisión Veronica Mars realizó una alusión al experimento cuando varios de sus personajes principales participaron en una recreación del mismo. En particular, hay dos personajes que actúan remedando al «Prisionero número 416» y «John Wayne».
·       El episodio Not for nothing de la serie Life gira en torno a una reproducción del experimento de la cárcel de Stanford.
·       La película estadounidense de 2010 titulada The Experiment, protagonizada por Adrien Brody, es un remake de Das Experiment

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