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Patricia Sosa cantará la Misa Criolla ante el Papa Francisco
"Cuando me enteré me puse a llorar" dijo la cantante que viajará a El Vaticano en diciembre. "Me prepararé de una manera espiritual", aseguró.
Alguna vez, Diego Torres y Luciano Pereyra cantaron ante Juan Pablo II. Hace poco, Soledad Pastorutti y Axel lo hicieron ante Francisco en Brasil. Y ahora, Patricia Sosa se sumará a la lista de los cantantes argentinos papales: en diciembre, interpretará la Misa Criolla en la Catedral de San Pedro, durante una misa que dará el Sumo Pontífice.
“El que empezó con todo esto -le contó la cantante a Clarín- es Facundo Ramírez, hijo de Ariel. Como este año se festejan los cincuenta años de la Misa Criolla,
y la Misa fue galardonada en Estados Unidos como una de las cien
mejores obras del siglo pasado, se armaron un montón de festejos por el
mundo. A Facundo se le ocurrió armar una serie de presentaciones y
decidió llamarme a mí, que fui cantante de su padre durante un tiempo, y
a Jaime Torres y Tukuta Gordillo, que son originales de la Misa. En el
medio, en el Vaticano se enteraron de que el hijo de Ariel Ramírez iba a hacer algo y solicitaron la presencia del espectáculo“.
Sosa recuerda que cuando se enteró de la convocatoria, no pudo contener la emoción. “Cuando me lo dijeron me puse a llorar. Con Facundo somos casi hermanos: lo abracé y le dije ‘algo bueno habremos hecho, en la vida para que nos toque ir a cantarle a un Papa cuando es argentino, y aparte la obra de Ariel, que para nosotros no es una obra más”, aseguró.
Ahora desea que, cuando llegue el día, el sentimiento no la rebalse. “Espero que no me traicione la emoción, porque me imagino que va a ser un momento de muchísima emoción. Trataré de ser todo lo profesional que me sea posible para que no se me haga un nudo en la garganta. Intentaré que la voz, el instrumento que me fue otorgado, salga lo más elevada que pueda hacerlo. Me prepararé de una manera espiritual muy consciente”, avisó.
Su marido, Oscar Mediavilla, y su hija Marta la acompañarán en el viaje, que ya tiene cronograma. El 10 de diciembre, ella y el resto de los músicos están citados en el Vaticano para un ensayo con el coro de la Capilla Sixtina. Al día siguiente por la mañana harán una prueba de sonido en la Basílica de San Pedro y el 12 a las 18 (hora de Italia) cantarán la Misa Criolla frente a Francisco.
Sosa es católica practicante, pero no tuvo oportunidad de conocer personalmente a Jorge Bergoglio. “Una persona que trabajaba con él cuando era Cardenal me decía que estaba al tanto de la tarea que hacemos con nuestra fundación, Pequeños Gestos, pero nunca tuve el gusto de conversar con él. En diciembre espero poder sacarme las ganas”.
Sosa recuerda que cuando se enteró de la convocatoria, no pudo contener la emoción. “Cuando me lo dijeron me puse a llorar. Con Facundo somos casi hermanos: lo abracé y le dije ‘algo bueno habremos hecho, en la vida para que nos toque ir a cantarle a un Papa cuando es argentino, y aparte la obra de Ariel, que para nosotros no es una obra más”, aseguró.
Ahora desea que, cuando llegue el día, el sentimiento no la rebalse. “Espero que no me traicione la emoción, porque me imagino que va a ser un momento de muchísima emoción. Trataré de ser todo lo profesional que me sea posible para que no se me haga un nudo en la garganta. Intentaré que la voz, el instrumento que me fue otorgado, salga lo más elevada que pueda hacerlo. Me prepararé de una manera espiritual muy consciente”, avisó.
Su marido, Oscar Mediavilla, y su hija Marta la acompañarán en el viaje, que ya tiene cronograma. El 10 de diciembre, ella y el resto de los músicos están citados en el Vaticano para un ensayo con el coro de la Capilla Sixtina. Al día siguiente por la mañana harán una prueba de sonido en la Basílica de San Pedro y el 12 a las 18 (hora de Italia) cantarán la Misa Criolla frente a Francisco.
Sosa es católica practicante, pero no tuvo oportunidad de conocer personalmente a Jorge Bergoglio. “Una persona que trabajaba con él cuando era Cardenal me decía que estaba al tanto de la tarea que hacemos con nuestra fundación, Pequeños Gestos, pero nunca tuve el gusto de conversar con él. En diciembre espero poder sacarme las ganas”.
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