Mirtha Sisnero no puede trabajar de colectivera en Salta: la Corte Suprema falló que es discriminación

de
Tiempo Argentino

22.05.2014 | el máximo tribunal de esa provincia había fallado en contra de la mujer

Es colectivera y en Salta no la dejan manejar: para la Corte es discriminación

 Mirtha Sisnero reúne los requisitos y se postuló en las siete empresas de transporte del distrito, que no tienen a ninguna mujer en su plantilla.

Por:
Tiempo Argentino

Es una excelente noticia, para mí y para todas las mujeres salteñas", dice Mirtha Graciela Sisnero, horas después de conocer el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que hizo lugar al amparo presentado por ella y un grupo de mujeres a las que se les negaba el derecho a trabajar como choferes de colectivos en la provincia de Salta. Con los votos de Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Carlos Fayt, Enrique Petracchi y Juan Carlos Maqueda, el máximo tribunal dejó así sin efecto una sentencia dictada por la Corte salteña, revocatorio de un fallo de Cámara que había hecho lugar a la demanda.
"Me decían que era una caprichosa, pero no, luché por una fuente de trabajo, y ya es tiempo de que a la mujer la valoren", sostiene hoy Mirtha en diálogo teléfonico con Tiempo Argentino. En 2008, junto a la Fundación Entre Mujeres, interpuso una acción de amparo contra la Sociedad Anónima del Estado del Transporte Automotor (Saeta), la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT) y siete empresas operadoras de transporte público de pasajeros de Salta, ante la negativa de incorporar a mujeres como conductoras, pese a cumplir, según el fallo de los camaristas, "con todos los requisitos de idoneidad requeridos". Las demandantes solicitaron entonces "el cese de la discriminación por razones de género". Ese tribunal dispuso, en efecto, establecer un cupo del 30% de mujeres en las plantas de choferes. Sin embargo, la Corte salteña revocó ese pronunciamiento.
Así se llegó –dictamen mediante de la procuradora Alejandra Gils Carbó, el año pasado– a la Corte Suprema de la Nación, que entendió que sí existe una "situación discriminatoria", puesto que "en las empresas demandadas no existen mujeres contratadas" y porque "dicha práctica se mantuvo aun después de las sucesivas postulaciones y reclamos por parte de Sisnero".
Con 42 años y dos hijos, Mirtha no afloja en su deseo de manejar un colectivo por Salta Capital, su ciudad, y se muestra esperanzada con el fallo. Asegura que son muchas las mujeres capacitadas para ser choferes, y que algunas manejan, "pero ninguna en blanco". Y señaló un apartado del fallo de la Corte, que cita declaraciones de Raúl Ale, uno de los empresarios demandados, que dijo a la prensa "sin ambages y entre risas" que en lugar de conducir "las mujeres deberían mostrar sus artes culinarias" y que sus manos "son para acariciar, no para estar llenas de callos".
La Corte recordó que "la discriminación no suele manifestarse de forma abierta y claramente identificable; de allí que su prueba con frecuencia resulte compleja" y destacó las obligaciones estatales establecidas en la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer.  «


A la Corte salteña
La sentencia de la Corte Suprema revoca la del tribunal provincial, que deberá volver a fallar.